Cuatro Décadas del Símbolo del Reciclaje
Omnipresente, encontraremos por doquier objetos con este símbolo. Todo el mundo lo reconoce, o al menos lo asocia con ciertas palabras, como reciclable o reutilizable. El símbolo universal del reciclaje, hoy en dominio público, surgió como una idea de una empresa de Chicago,
Anderson empleó muy bien los 2.500 dólares del premio, pues los utilizó para ampliar estudios en Europa. Su diseño es considerado como uno de los más influyentes del siglo XX, ¡y eso que sólo es un símbolo ?de nada?! Aunque resulte sorprendente, el joven estudiante de arquitectura y ciencias sociales no se dedicó al diseño gráfico, aunque sí que realizó algunos trabajos en ese campo. Con el tiempo se doctoró en geografía e ingeniería medioambiental, llegando a convertirse en lo que ahora es, todo un experto mundial en ordenación y planificación territorial y problemas ambientales. Pero, a pesar de sus muchas actividades en múltiples campos, será recordado en
La obra Banda de Möbius II, en la que unas abnegadas hormigas recorren el infinito trazado de la cinta de una sola cara y un solo borde descrita por los matemáticos August Ferdinand Möbius y Johann Benedict Listing a mediados del siglo XIX, fue lo que le sirvió a Gary Anderson para diseñar su logo. Unió las ideas de infinito y reciclaje, tras contemplar el cuadro de Escher y, ¡ya está! Toda una genialidad. ¿A cuántos más habrá alimentado intelectualmente la inquieta mente de Maurits Cornelis Escher? Seguro que la respuesta se acerca a ?infinito?.
Fotografía: Gary Anderson | Fuente: (CC) Wikimedia Commons.
Publicado en: http://www.alpoma.net